Hoy no he podido aguantarme después de leer un comentario en el twuitter de un nudista que se sentía ofendido por lo que había oído decir de él en una playa nudista 'escupido' por un ignorante, de los llamados textiles y que desde mi punto de vista son cerebro-constreñidos.
(Nota a pie de página, estoy hasta los mismísimos huevos de que palabras como nudista aparezcan como faltas de ortografía en la mayoría de las redes sociales, señores crezcan un poquito, parecen críos pequeños jugando al caca-culo-pedo-pis).
Siguiendo con el tema, nuestro amigo se quejaba de que un 'textil' había realizado un comentario fuera de tono sobre la longitud de su miembro (pene), demasiado pequeño para ser admitido en una playa nudista, ni que te lo tuviesen que medir para ser admitido, como la altura de los niños en las piscinas de bolas. Y aquí va la primera:
"Dime de que presumes y te diré de que careces"
(Pero no me voy a rebajar en ponerme desnudo para darte una lección de lo que hay que tener para estar en esta playa)-posible pensamiento del kilometro-sexual.
Lo que no llego a entender (o si) es que hace una persona tan cenutria en una playa nudista, bueno si, digamos que va a mirar aquello que le gustaría tener para darle "gusto a su pareja", la cual decidirá el tamaño preciso y grosor que le gustaría disfrutar. También es posible que no se mire por las mañanas al espejo, y solo su mirada se desplace hasta el ombligo, ya que más abajo es pecaminoso y no propio de una persona en sus cabales.
Que lastima de individuos, esos y otros muchos que pretenden volver a inculquir la moral retrograda y fascista del buen españolito. Ya sabemos:
"Dime lo que crees ser y te diré lo que no eres"
No eres una persona cabal, eres un obseso y reprimido.
Tranquilo amigo, estos individuos son muchos y andan por todos los sitios, es penoso y es difícil educarlos, además se creen la sabiduría absoluta, unos iluminados. LO mejor es pasar de las sandeces y no hacerlas ni puto caso.
Un saludo a todos lo que leéis esto. A los dirigentes de Blogger que maduren:
El valiente tiene miedo del contrario, el cobarde de su propio temor.
Francisco de Quevedo.
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