Siempre que se trata el tema se habla del medievo, o de cuando cristo perdió el mechero, años y años en el pasado. Nunca se piensa que muchas de las represiones actuales, sobre todo las relacionadas con el cuerpo desnudo, son bastantes actuales, yo diría que muy actuales. Debemos comprender que las marcas de ropa tienen actualmente el negocio más exuberante, además hoy día se llegan a pagar cantidades exorbitantes por un pedazo de tela, en algunos casos de escasa calidad, si lleva la firma o el logotipo de Menganito ... modisto o diseñador de "reconocido talento".
En muchos de los casos se apela a una infinidad de estupideces para criminalizar un desnudo, desde que es pornográfico (que si que los hay), pecaminosos (que no los hay, depende de la religión del cristal con que se mire) o el filtro del código penal con el que se analice, en algunos casos con el ojo del partido político del alcalde y concejales que dirijan la zona donde se produzca. Estos últimos son los peores ya que si es necesario se inventan y corrigen al resto de la población del país, para decirles que están equivocados y que ellos, en un acto de civismo y fe, son dignos de corregir los deseos carnales del resto de la población, AMEN.
Curas, políticos, funcionarios de la ley y comerciantes textiles, ademas de algún exaltado ultra-ortodoxo, son los responsables de la moral retorcida y medieval actual, no son de hace muchos años, son bastantes recientes. Me gustaría ver a alguno de estos individuos (masculinos o femeninos) por la mañana en el baño; creo que tendendría dos tipos de personas, aquellos que se ponen una venda en los ojos o miran al techo para no verse reflejados en el espejo, ya que les causaría un trauma moral insoportables y, los que se dedican a la contemplación de sus carnes haciendo alarde de la gracilidad y fortaleza, exuberancia, rigidez o tamaño de sus partes, sobre todos las púdicas, esas que no se ven y se enseñan solamente en ciertos casos o eventos, nunca públicos, por la comparación claro.
Eso si, los que están enfermos son aquellos que no les importa que les vean desnudos, casi siempre locos, ya que es la expresión que normalmente se oye cuando alguien se desnuda en público; que necesitan apoyo de todo tipo, primero psicológico, después espiritual y por último médico, este último por las enfermedades que han podido contraer al "arrastrarse" sin ropa por su entorno, ni que uno se convirtiera en caracol cada vez que se desnuda. Pero lo malo de esto es que esta gente no se entera de su propia situación, se pasa el día entero con unos calzoncillos o bragas pegados a sus partes genitales, en muchos casos sudados durante mas de 18 horas, en algunos caso más de 24, día tras día; que cada vez que les pica los genitales se hecha una pomada para aliviarse, en vez de airearlos (que se van a asfixiar) y lo aderezan con muchísimos perfumes para que no se detecte el olor que desprenden.
Cuando ya no quedan más escusas siempre esta la frase de ' ya, ya me contaras cuando llegue el invierno y empiece a hacer frío ...". Cuando llegue el invierno me abrigaré para no pasar frío pero en cuanto pueda o las circunstancias lo permitan volveré a despojarme de la ropa y a disfrutar de lo que es mio sin falsas apariencias y disfraces traperos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario